PALABRAS DEL SANTO PADRE A LAS FUERZAS ARMADAS Y A LA POLICÍA DE COLOMBIA
Buenos días,
quiero agradecerles esta presencia de ustedes aquí. Agradecerles también todo lo que han hecho, lo que hacen y lo que seguirán haciendo en estos días durante mi visita. Trabajo añadido. Pero, sobre todo, quiero agradecerles lo que han hecho y lo que hacen por la paz poniendo en juego la vida. Y eso es lo que hizo Jesús: nos pacificó con el Padre, puso en juego su vida y la entregó. Esto los hermana más a Jesús: arriesgar para hacer paz, para lograr paz. Gracias de corazón por todo esto. ¡Gracias!
Y ojalá que puedan ver consolidada la paz en este país que se lo merece.
Y ahora, todos juntos, les pido que recemos en silencio por todos los caídos y por todos los que quedaron heridos, algunos que están aquí entre nosotros. Recemos un instante en silencio y después un Ave María a la Virgen.
[Ave María...]
[Bendición apostólica]
Y por favor, les pido que recen por mí, no se olviden. Gracias.